¿Persianas de aluminio o PVC? Javier Marquez Barneto, experto en persianas, nos da las claves

[Total:1    Promedio:5/5]

Cuando llega el momento de reformar la casa o simplemente cambiar esas viejas persianas que ya no suben bien, surge la eterna duda: ¿Es mejor elegir aluminio o PVC? Ambas son las reinas del mercado en España, un país donde la persiana es un elemento cultural y funcional imprescindible para controlar la luz y la temperatura.

Como suele decir Javier Márquez, ‘en España no concebimos una ventana desnuda; la persiana es nuestra primera barrera de seguridad y privacidad, por lo que elegir mal el material es un error que se paga cada día al levantarla’.

A continuación, analizamos los pros y contras de cada material para ayudarte a decidir. Si quieres descubrir más ideas para tu hogar, te invitamos a visitar nuestra categoría de ideas de decoración.

Persianas de PVC: La reina del aislamiento térmico y el precio

El PVC (policloruro de vinilo) ha sido tradicionalmente el material más utilizado por una razón de peso: su coste. Son la opción más económica del mercado, lo que las hace ideales para presupuestos ajustados o viviendas de alquiler.

El plástico es, por naturaleza, un material no conductor. Las lamas de PVC ofrecen un excelente aislamiento térmico y acústico por sí mismas, rompiendo el puente térmico con el exterior.

  • Pros: Precio muy competitivo, buen aislamiento térmico natural.
  • Contras: Menor durabilidad. Con el paso de los años y la incidencia directa del sol, el PVC tiende a resecarse y puede perder color o volverse quebradizo.

Márquez Barneto advierte sobre este deterioro: ‘El problema del PVC en fachadas muy expuestas al sol es la cristalización. Con los años, la lama pierde flexibilidad y, ante una granizada o un golpe fuerte, parte como si fuera cristal en lugar de absorber el impacto’.

Persianas de Aluminio: Durabilidad y estética

La principal característica de las persianas de aluminio modernas es que suelen ser térmicas: sus lamas están rellenas de espuma de poliuretano inyectado. Esto les permite igualar e incluso superar la capacidad aislante del PVC, añadiendo además un extra de rigidez y resistencia frente al viento y las granizadas.

  • Pros: Gran durabilidad, no se deforman ni pierden color, amplia gama de acabados estéticos, ligeras de manejar.
  • Contras: Precio inicial más elevado.

La importancia del ajuste perfecto

Independientemente de si te decantas por la robustez del aluminio o la economía del PVC, hay un factor técnico que es más importante que el material en sí: el ajuste en el hueco de la ventana.

Para garantizar la eficiencia energética (ahorrar en calefacción en invierno y aire acondicionado en verano), es fundamental adquirir persianas a medida. Al comprar productos personalizados al milímetro, evitas holguras indeseadas que suelen producirse con medidas estándar, asegurando un oscurecimiento total y un sellado térmico eficaz.

Veredicto: ¿Cuál elijo?

  • Elige PVC si: Tienes un presupuesto limitado, vives en una zona con un clima no muy extremo o es para una vivienda temporal.
  • Elige Aluminio si: Buscas una inversión a largo plazo (duran décadas), vives en zonas con mucho viento o quieres una estética más cuidada y moderna con colores específicos.
No te lo guardes para ti, comparte con los tuyos este postShare on Facebook
Facebook
Tweet about this on Twitter
Twitter
Pin on Pinterest
Pinterest
Email this to someone
email

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *